lunes, 24 de mayo de 2021

LA BIEN QUERIDA (TOMAVISTAS EXTRA)

Festival Tomavistas Extra
Madrid
Parque Enrique Tierno Galván
23/05/2021





Un 8 de marzo de 2020, hacía justo #440 días, estuve en mi último concierto prepandemia.

Las cosas ya no eran normales aquella tarde-noche del año que nos cambió la vida, pero el poco público que tuvimos la suerte de acudir a aquella sala en el hotel Barceló Imagine en Madrid nos veíamos ya sentados, con cierta distancia de la persona de al lado (no llegaba al metro) y con gel hidroalcohólico en la entrada: todo era muy raro y no se presagiaba nada bueno a futuro. Pero había cierta esperanza de que saldríamos pronto de un agujero que aún no era tal, pero que era evidente que nos esperaba en nuestro camino.

Y, aunque desde aquella fecha, ya hacía meses que me había sentado delante de un escenario por primera vez (y eran unos cuantos los conciertos a los que había ido desde que se habían relajado las restricciones en la música en directo), ya con mascarilla y distancia, con protocolos de seguridad sanitaria y controles de temperatura, este 23 de mayo era un día muy especial, porque volvía a visitar, en el Festival Tomavistas, a La Bien Querida, la artista que visité en aquel último concierto.

Y lo hice con una sensación extraña en el cuerpo, pero recuperando la confianza que muchos y muchas teníamos aquel día. La de recuperar cuanto antes nuestras vidas. Nuestras rutinas. Nuestras alegrías y nuestras tristezas. Y, por supuesto, nuestra música.

Así que, volvimos.

El grupo navarro Melenas, encargado de telonear a la bilbaína, había sido galardonado el pasado mes de enero con el premio a la mejor banda alternativa en la entrega de los Music Moves Europe Talent Awards, organizados por la Unión Europea para promover el talento joven y emergente. Ese impulso institucional no era, por supuesto, la razón para reconocer a una banda que derrocha calidad, entrega y muchas ganas de pasarlo bien, tal y como demostraron en el concierto.

La Bien Querida entró con unos minutos de retraso, con un precioso vestido rojo muy de su estilo, y con un ventilador a sus pies que ondeaba los vuelos de la falda y le daba aún un aire más bonito a la estampa. Acompañada por una teclista, un batería y un guitarra, aún arrancando con algunos problemas de sonido (la prueba de la tarde se había visto sacudida por un aguacero que había caído en Madrid), pronto se corrigieron y dieron como resultado un sonido muy bueno durante todo el concierto. En su repertorio entraron todos sus éxitos, y en la cerca hora y cuarto de concierto, estuvo acompañada por J de los Planetas o Diego de Carolina Durante, dos de sus últimas colaboraciones.

Destacar una vez más el buen trabajo hecho por la organización del Festival, que puso de nuevo el listón alto y unas enormes dosis de profesionalidad.